Las invasiones de los seis primeros kilómetros de la carretera Panamericana se han desbordado de una manera que ya están tocando territorio de Caricuao, que irónicamente alcanzó en septiembre pasado el estatus de parroquia ecológica, la única que existe en el país. En lo más alto del parque recreacional Vicente Emilio Sojo todo el terreno está arrasado por quemas controladas y deforestación, que siempre son el paso previo a las invasiones. Y dos ranchos han sido ya construidos, aunque al parecer todavía permanecen vacíos.
Desde ese lugar se puede ver en su justa magnitud cómo han crecido además las invasiones que vienen de La Vega y que también proyectan su amenazante sombra sobre Caricuao, tanto desde el sector Las Casitas como desde Las Torres.
Jorge Mujica, integrante del Consejo Comunal Caricuar, sabe muy bien qué es lo que traen estas invasiones: "inseguridad, basura, aguas negras y daño al ambiente". Dice que la junta parroquial, la comisión de Ambiente de Libertador y la Guardia Nacional están al tanto de esta nueva invasión que viene desde la Panamericana, pues todos estos organismos fueron notificados desde finales de febrero, cuando un grupo de vecinos la descubrió.
Relata que los conductores de transporte público se niegan a llegar hasta ese lugar en la UD5, pues los atracos se han vuelto comunes: "Roban y agarran ese camino que les conduce a La Vega o a las invasiones de la Panamericana".
Por su parte Maribel García dijo que el próximo 10 de abril habrá un acto en donde, entre otras personalidades, estará el diputado Darío Vivas, y allí entregará, junto a otros vecinos, una propuesta para que los 4 parques recreacionales se protejan mientras se redactan las ordenanzas que determinarán el funcionamiento de Caricuao como parroquia ecológica.
En Caricuao están hartos de invasiones, pues aparte de las ya mencionadas deben soportar además las que están en los alrededores de la iglesia San Martín de Porres (UD2), la que existe en la vía principal frente a la escuela de suboficiales de la GN y la que se está asentando en terrazas de Arauca y terrazas de Payara (UD4).
Montañas tapizadas de ranchos
Las invasiones en la Panamericana, que tienen tomados sus seis primeros kilómetros y que tienen convertido el kilómetro cero en un cloacal, no son las únicas que han aparecido en la ciudad en los últimos años.
Todas las montañas en los cuatro primeros kilómetros de la vía hacia El Junquito fueron tapizadas de ranchos en los últimos seis años, y en los siete primeros kilómetros de la Petare Guarenas han nacido cinco gigantescos barrios en los últimos diez años.
Para la arquitecta Teolinda Bolívar, esto se debe a la conjunción de varios factores: no hay una oferta de vivienda que satisfaga las necesidades de la gente, no hay control de crecimiento de los sectores populares desde Pérez Jiménez y se abandonó el programa de rehabilitación de barrios.
Le preocupa el hecho de que los barrios han crecido de tal manera que 56% de la población de Caracas vive en ellos, y envía un alerta: "Están creadas las condiciones para una tragedia de grandes proporciones en la que los más pobres van a ser los más perjudicados".
Javier Brassesco--EL UNIVERSAL
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